y es que aquí
en la aspereza de tu ausencia,
entiendo que si no me entrego a ti
me entrego a la tristeza.
escucha, corazón
que si bailamos con la honestidad
de no tenernos
y te hablo las cosas como son,
es ahora que te firmo
el más sincero adiós
me voy
pues antes solo y afligido
que vivir a tu lado mal querido.
y aunque me estruje la tristeza
o me embruje tu mirada,
de mí ya nunca sabrás nada
pues entre tus brazos y el vacío,
hoy decido no volver.
iré a ser uno con la pena:
me daré a ella como un día me di a ti.
y quizá le ruego a esta aflicción
que me haga el aire
que no ves pero sí sientes.
o le imploro que mi cuerpo sea calor:
así si no me lloran tus ojos,
que me sude tu piel.
porque la soledad es cabrona
pero yo también.
y el saber que no me amas
entra en mi pecho ardiente
y sale como un suspiro
en llamas.
amor,
tu partida me ha hecho
aire y me ha hecho calor.
y el dolor de no tenerte
es fricción que
termina en combustión.
pero no te equivoques:
que en esta fiesta de cenizas
en la que yo soy el fuego,
te incendiarás tú
y se incendiará tu
recuerdo.
Jezzini